domingo, 24 de mayo de 2009

ROMPE LAS CADENAS - VOTA COMUNISTA, VOTA PCPE



Ante las elecciones europeas del 7 de junio de 2009, el PCPE plantea a la clase obrera y al conjunto de los sectores populares de los pueblos de España una propuesta política que se articula sobre seis ejes:




Democracia
Luchamos por la democracia frente a la dictadura del capital
La Unión Europea del capital y la guerra no es democrática. No puede haber verdadera democracia bajo el capitalismo, pues los intereses de los trabajadores y los pueblos no coinciden con los intereses del capital. No hay arreglo entre posiciones antagónicas, y esto lo saben bien los burócratas de Bruselas y los gestores del capitalismo en los distintos estados miembro.
En la Unión Europea se han dado y se dan múltiples situaciones en que la voluntad democrática de los pueblos se ve cercenada, como en el caso de Irlanda, donde el referéndum que dijo NO al Tratado de Lisboa será repetido a lo largo de 2009 para tratar de doblegar la voluntad del pueblo irlandés.
La Unión Europea plantea una campaña ideológica que trata por todas las vías de laminar aquellos planteamientos que supongan su puesta en duda o simplemente un cambio en el status quo. En el Estado Español se ilegalizan organizaciones políticas independentistas vascas, en la República Checa se ilegaliza a la Unión de la Juventud Comunista por defender el socialismo, en los países bálticos los partidos comunistas son directamente ilegales, se persigue a toda organización de liberación nacional de terceros países con la llamada “lista de organizaciones terroristas”, se aprueban en el Parlamento Europeo resoluciones equiparando comunismo y nazismo; y todo ello para lograr acallar las voces críticas, las que plantean una alternativa.
La Unión Europea y sus estructuras políticas no son democráticas porque no pueden serlo. El papel del Parlamento Europeo, supuesta sede de la soberanía popular, es el de comparsa de la institución intergubernamental que es el Consejo Europeo y el supuesto “gobierno” europeo que forma la Comisión Europea. No hay vinculación entre el Parlamento y estos órganos, los gobernantes europeos no se someten a ningún control parlamentario, ni siquiera al de los parlamentos burgueses estatales.
La Unión Europea es una expresión superior de la dictadura del capital. Ya no hace falta mantener la formalidad democrática para adoptar medidas antiobreras y antipopulares.
Frente a esta situación, los y las comunistas del PCPE rechazamos todo intento de criminalización de las ideas políticas y, concretamente, del comunismo. Nos oponemos firmemente a las ilegalizaciones de organizaciones populares.



Trabajo
Defendemos el trabajo frente al capital
Las estructuras de la Unión Europea y los gobiernos de los países miembro siguen propugnando un incremento de la jornada laboral hasta las 65 horas semanales, plantean reestructurar el mercado laboral favoreciendo el despido libre y la pérdida de derechos de los trabajadores, ponen en tela de juicio el sistema entero de las relaciones laborales, en muchas ocasiones con el apoyo consciente de las cúpulas sindicales, profundizan en la pérdida de peso del trabajo frente al capital en el PIB, favorecen el dumping social y las deslocalizaciones, promueven la flexiseguridad como nueva forma de precariedad laboral. La Estrategia de Lisboa, el Tratado de Lisboa, la Constitución Europea, la elevación a nivel legal del capitalismo y la libre competencia, todo ello ha de ser combatido con la mayor firmeza y unidad por los sectores populares y la clase obrera.
Frente a esto, los y las comunistas del PCPE nos reafirmamos en nuestra defensa de los más amplios derechos laborales y sindicales para los trabajadores, la prohibición de las deslocalizaciones, la causalidad en el puesto de trabajo y la exigencia de las 35 horas semanales de jornada máxima para cualquier trabajador o trabajadora.



Justicia social
Luchamos por la justicia social frente a las elites y los privilegios
El pueblo trabajador y la clase obrera no pueden dejarse engañar ante una situación en la que, gradualmente, los sistemas públicos y universales de educación y sanidad están siendo desmontados, los servicios sociales y las pensiones están siendo privatizados y sometidos a los designios del mercado.
El desmontaje de lo que queda del llamado “Estado del bienestar” es un ataque directo a los trabajadores y trabajadoras, así como al conjunto de los sectores populares. Los derechos sociales conquistados tras años de luchas del movimiento obrero y popular están siendo eliminados y convertidos en servicios a prestar por las empresas y regulados por el mercado.
El proceso de Bolonia, las fundaciones hospitalarias, la doble jornada legal del personal sanitario, la ley de dependencia que da preferencia a las empresas en la gestión de los servicios costeados con dinero público, todo ello son ejemplos de que se persigue el objetivo final de NO DEJAR NINGÚN ESPACIO VEDADO A LA VORACIDAD DEL CAPITAL.
Frente a esto, los y las comunistas del PCPE planteamos que la existencia de sistemas de sanidad y educación públicos, universales y gratuitos, no son quimeras, que la reversión de todo servicio público privatizado, bien en la gestión, bien en la financiación, es posible si hay lucha y resistencia de la gente a las medidas privatizadoras, que la paralización de la reforma educativa amparada en el proceso de Bolonia y la recuperación del control y gestión de los recursos sociales, económicos y naturales para ponerlos a disposición del pueblo trabajador son objetivos viables, siempre y cuando la mayoría social, la mayoría que genera la riqueza, plantee su voluntad de resistencia, su voluntad de romper las cadenas que la Unión Europea y el capitalismo nos han impuesto a los pueblos.


Solidaridad
Practicamos la solidaridad frente a la Europa de los muros
El capitalismo europeo, al igual que el norteamericano, es especialista en el saqueo de otros países, reeditando el colonialismo de otros siglos. En el caso concreto de los países miembros de la Unión Europea, la necesidad de obtener recursos de otros países se incrementa por la ausencia de suficientes recursos naturales en el propio territorio y a la voracidad de la maquinaria capitalista, despilfarradora y autodestructiva.
El sostenimiento del nivel de crecimiento económico del sistema capitalista en Europa exige el sometimiento de países enteros y la entrega de sus recursos naturales, impidiéndose por tanto el desarrollo económico de estos pueblos. A nadie le puede extrañar entonces que haya una enorme cantidad de trabajadores y trabajadoras que optan por arriesgar la vida, abandonar esos países y tratar de llegar a los países europeos, donde resulta que son criminalizados, encarcelados y, finalmente, expulsados, si han logrado llegar con vida.
La idea de la Europa fortaleza, que reprime y encarcela a quienes salen de sus países, asolados y saqueados por el capitalismo europeo y norteamericano buscando trabajo y dignidad, debe ser destruida. Frente a las directivas xenófobas y racistas, como la directiva de retorno, frente a los centros de internamiento y las cárceles para inmigrantes, planteamos el reconocimento de plenos derechos para quien viva y trabaje en cualquier país europeo. Rechazamos el Tratado de Schengen y demás medidas para impedir el tránsito entre países de la UE y luchamos por la libre circulación de trabajadores.
En una situación de crisis como la actual, combinada con la voluntad de acabar con los servicios públicos, combatimos todo intento de culpar a los trabajadores y trabajadoras inmigrantes de la crisis, todo intento racista de establecer preferencias o prioridades entre nacionales y extranjeros, así como la utilización manipuladora de las cifras económicas de los servicios públicos.



Internacionalismo



Defendemos el internacionalismo proletario frente a guerra imperialista
La Unión Europea actúa internacionalmente defendiendo sus intereses económicos. El papel de la UE en América Latina busca ganar posiciones ante el retroceso de EEUU en la zona, pretendiendo dar una imagen distinta, tiñendo de cooperación lo que no es más que neocolonialismo y paternalismo. Se pretende garantizar un “espacio de seguridad” en el Mediterráneo mediante la Unión Mediterránea (UM), a cambio de beneficios para los países que utilizan como moneda de cambio y mecanismo de presión el sufrimiento de miles de inmigrantes africanos y de otras zonas.
Los intereses económicos de la UE en el mundo actual se extienden a gran parte del mundo, no sólo a sus zonas limítrofes. Los contingentes militares europeos en Afganistán, Somalia, Irak, Líbano, Haití, Congo, etc., garantizan el saqueo y el expolio cometido por empresas europeas en esos países.
Los y las comunistas del PCPE hablamos de internacionalismo proletario, y lo ponemos en práctica. Nos oponemos a toda aventura militar en el extranjero bajo cualquier paraguas (UE, OTAN, OSCE u otros), nos oponemos a toda práctica neocolonial de saqueo, defendemos ante todo y ante todos el derecho de todo pueblo a establecer sus relaciones económicas en beneficio propio, a establecer su propio camino de desarrollo sin necesidad de contar con la aprobación de la UE o de EEUU.
Luchamos, por tanto, contra la posición común de la UE frente a la República de Cuba, contra los intentos de desestabilización de las democracias antiimperialistas de América Latina, así como contra la posición ambivalente y tibia de la UE frente al terrorismo sionista contra el pueblo palestino y el resto de pueblos de Oriente Medio.
Soberanía nacional
Defendemos la soberanía nacional frente a imperialismo
Ante la UE imperialista, sus políticas y su militarismo, proponemos la recuperación de la plena soberanía nacional, el ejercicio pleno del derecho de autodeterminación, que en el caso del Estado español implica también el ejercicio pleno del mismo por parte de los pueblos y naciones que forman parte del mismo, que implica la desvinculación de las instituciones imperialistas y capitalistas internacionales, de la propia UE y la OTAN.
Así, sólo así, sin vínculo ninguno con el imperialismo, podremos los pueblos y naciones de España forjar ese futuro republicano y socialista por el que lucha el PCPE, construyendo esa República Socialista de carácter Confederal donde podamos, ejercitando libremente nuestro derecho a decidir, forjar las relaciones con el resto de pueblos hermanos del mundo en base al respeto, a la igualdad y al beneficio mutuo, en la senda del socialismo y el comunismo.
Trabajador, trabajadora, estudiante, pensionista, parado, autónomo, el 7 de junio tienes la opción de decir NO a las cadenas que nos impone la Unión Europea. Vota PCPE y estarás votando por:


-Trabajo fijo decente con plenos derechos laborales con aumentos reales de los salarios y las pensiones.



-Que los pueblos sean los dueños de los recursos de riqueza y de los sectores estratégicos de las economías de sus respectivos países.



-Sistemas públicos y gratuitos de salud y seguridad social. Por la rebaja de la edad de jubilación e incrementos reales en las pensiones. Por una educación mejor, unificada y pública para todos.


-Plenos derechos para los trabajadores inmigrantes.


-Apoyo al pequeño y mediano campesino y seguridad alimentaria. Por la protección real del medio ambiente, que se sacrifica en beneficio del gran capital.


-Derecho de todo pueblo a elegir su propia vía de desarrollo. Este derecho incluye el derecho de desvinculación de las múltiples ataduras con la UE y la OTAN, así como la opción socialista y el reconocimiento del derecho de autodeterminación de los pueblos de España.


-Paz, retirada de todas las bases de EEUU-OTAN y desmantelamiento de la OTAN. Contra el “Partenariado por la Paz” y el Euroejército. Ninguna participación en guerras e intervenciones imperialistas.


-Solidaridad con todos los pueblos que luchan. Por un estado palestino independiente con capital en Jerusalén. Por la defensa de Cuba Socialista y la abolición de la posición común de la UE hacia la misma.


Rompe las cadenas
Frente a la Europa del Capital y la Guerra
Vota PCPE