Una vez más, y siguiendo su política
asesina y oportunista desde que se fundó por la fuerza como estado en esta zona
del mundo, Israel declara la guerra al pueblo palestino en Gaza de la forma más
vil y ruin al asesinar al líder militar de Hamas en Gaza Ahmad Al Jabari cuando
circulaba, junto a su acompañante, en un vehículo en plena calle abarrotada de
transeúntes.
El oportunismo de la acción criminal
israelí, una semana después de las elecciones norteamericanas y dos meses antes
de las elecciones de Israel, obedece a la naturaleza asesina de la entidad
sionista que siempre ha hecho campañas electorales a costa de la sangre de los
pueblos árabes vecinos que se niegan a aceptar la humillación de la ocupación
más atroz y asesina de la historia de la humanidad. En esta ocasión, esta
guerra llega en una coyuntura más complicada aun después de los cambios
políticos apoyados por el centro del imperialismo, favoreciendo la llegada al
poder en más de un país árabe a los Hermanos Musulmanes, en alianza con la
Turquía otanista gobernada por Erdogan, un islamista “moderado” y aliado fiel
del imperio yanqui y sus lacayos emires del petróleo en la zona. Llega en un
momento crucial en la guerra de agresión que sufre desde 20 meses Siria, un
país árabe laico y eje de la resistencia contra Israel, una guerra promovida,
sostenida y apoyada por el imperialismo de occidente en consonancia con el
reaccionarismo árabe de los emires del petróleo lacayos del imperialismo, y en
coordinación con Turquía (miembro activo de la OTAN) e Israel.
Podemos entender que esta guerra llega,
también, después de una larga campaña de presiones y amenazas contra Irán, el
principal aliado de las facciones de la resistencia en la zona (principalmente
en El Líbano y Palestina) junto a Siria, lo que no lleva a intuir, que la
agresión contra Gaza es un ensayo para tratar de comprobar el tipo de armas que
maneja la resistencia y su capacidad de fuego y de aguante, pero en el caso de
Gaza, existe un matiz muy importante, puesto que dentro del propio Hamas, que
es un movimiento islamista afín al movimiento de los Hermanos Musulmanes,
existen divergencias con respecto a Siria, a la oportunidad de incorporarse al
proceso de paz y reconocer a Israel o a la oportunidad de desvincularse del eje Irán - Siria. Los elementos más reacios a
esta estrategia están en el brazo armado de Hamas, y son el objetivo principal
de los “asesinatos selectivos” de Israel. Se pretende, en este caso, repetir lo
que se hizo con el movimiento nacional de Fatah, de Yaser Arafat, antes del
comienzo del proceso de paz de Oslo: eliminar a los líderes y elementos
contrarios al fraudulento proceso de paz.
Israel, que es el producto y el proyecto
del imperialismo capitalista pos descubrimiento del petróleo en la zona, se ha
mostrado a lo largo de la historia como una entidad incompatible con la paz,
puesto que su función y naturaleza como entidad gendarme y guardián de los
interese del imperialismo y de los regímenes dictatoriales de las familias
feudalistas árabes impuestas por occidente sobre un mar inmenso de petróleo y
de recursos naturales, se lo impide.
Mucho nos tememos, si no se lo impiden los pueblos respectivos
de los países capitalistas, que la agresión sobre Gaza no es más que el
comienzo de una guerra regional de grandes dimensiones que el imperio
capitalista necesita provocar para salir de sus crisis económicas e imponer a
Israel como única potencia regional. Es deber de todos los movimientos,
sindicatos y partidos revolucionarios presionar en sus respectivos países en
Europa y EEUU para denunciar esta nueva guerra de agresión. Una guerra regional
en estos momentos nos llevaría a un enfrentamiento de amplias proporciones a
escala mundial. La naturaleza asesina del imperialismo, su codicia y su falta
de humanidad, son capaces de reiniciar guerras mundiales de desconocidas
consecuencias con tal de imponer su dominio, y proteger su hegemonía económica,
política y mercantil.
Los pueblos en vía de desarrollo tienen,
hoy en día, mejores armas y herramientas para luchar y deshacerse de este
dominio y alcanzar su libertad. Hemos de participar todos en esta tarea de
concienciación y denuncia contra la agresión y las guerras imperialistas.
En estos momentos una vez alcanzado un
acuerdo de alto el fuego con la mediación del “Egipto hermano musulmanista”,
debemos permanecer en estado de máxima alerta y prepararnos para la siguiente
fase del inevitable enfrentamiento contra el capitalismo en estado de
descomposición y decadencia, con y a través de su brazo armado estado asesino
de Israel. Quedó claro que en estos ocho días de enfrentamiento, el objetivo
que perseguían Israel y EEUU, junto a
sus aliados locales (árabes y turcos reaccionarios), era el de poner a prueba
la eficacia de su escudo antimisiles para una posible guerra abierta de grandes
dimensiones. Esta guerra no ha hecho más que alimentar nuestras sospechas de
que la deriva y la apuesta del imperialismo por imponer su voluntad y sus
políticas genocidas contra los pueblos, no ha hecho más que entrar en la
siguiente fase, y nada más empezar el nuevo mandato del presidente Obama,
ganador de un más que sospechoso premio nobel de la paz.
Viva la lucha de los pueblos
Viva Palestina libre